Los soldados britanicos queman un alijo de drogas. Mientras, el periodista hace alarde de profesionalidad informando de la noticia, hasta que acaba morao perdido el hombre. Al menos se le ve contento.
martes, 2 de junio de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario